DELINCUENCIA MOTORIZADA
Conducir en las calles y avenidas de nuestro país sabemos lo que significa, donde las avenidas principales de las zonas se puede ser víctima de intento de robo o robo, tanto por malos ciudadanos a pie o bien en la modalidad que todo el mundo le teme, en motocicleta.
El parque de vehículos de dos ruedas se ha multiplicado, es común ver los espacios en las calles entre vehículos de cuatro ruedas las motos que puedan pasar por allí, la cultura de conducción vial no es buena en nuestro país, ni siquiera la del peatón, mucho menos de vehículos. Pero nos enfocamos en las motocicletas porque se han multiplicado de forma desproporcionada, aunque hoy en día existe una ley que regula este tipo de vehículo es una ley muerta, no se cumple y hay que ser conscientes que no hace diferencia, un número en el casco y en un chaleco de color naranja no hizo que se minimizara los hechos delictivos, porque es como se hubiese uniformado a todos los motoristas.
Debemos ser conscientes también que no se puede estigmatizar a todos los motoristas, recordemos que ese vehículo para la mayoría el único medio de transporte decente para trasladarse al trabajo y desgraciadamente para transportar hasta 5 o 6 miembros de su familia en un día de recreación. También es ilógico limitar al motorista a menos de sus 2 tripulantes para lo que fue creada.
Además no es ningún secreto que la delincuencia siempre usan la inteligencia, van un paso más adelante que las reacciones normativas y de seguridad. A eso hay que sumarle el hecho que los delincuentes no tienen brújula moral, un chaleco no haría que impidiera que siguiera delinquiendo. Yo mismo fui testigo que los motoristas que aparentaban andar mejor identificados eran los que andaban delinquiendo allí por la 13 calle de la zona 11, dándole vuelta a la manzana con cada atraco, asaltaban a un vehículo de uno a dos motoristas, y daban la vuelta y hacían lo mismo de nuevo, hasta que la zona se "calentaba" y al fin después de varios y varios atracos se escuchaba una sirena de patrulla a varias cuadras y anunciaba que era la hora de retirarse del lugar con las ganancias. Creo que pude contar 5 motoristas sin acompañante dando vueltas y ese era su modus operandi, uno de ellos se quedaba a la par y con moto encendida desenfundaba un arma y golpeaba los vidrios polarizados de los vehiculos con la cacha del revolver, de dicha este era un malandro aún con escrúpulos, puesto que en esa ocasión un vehículo mazda 3 se cruzó al carril central y el moto ladrón tuvo que enfundar su revolver y dirigirse a dar la vuelta de nuevo a buscar otra víctima.
Captó mi atención, decidí estudiar el hecho esta vez y no actuar, allí vi que eran 5 motoristas dando la vuelta varias veces en la misma manzana aprovechando el tráfico de las horas pico de la tarde, irónicamente parecían ser motoristas por lo menos de apariencia muy respetuosos a la ley, número de placa en el casco, chaleco con otro numero parecido y un número de placa muy parecido a los otros dos, ropa bastante formal, motos en muy buen estado de aspecto pulcro, de modelos recientes, como recién compradas, no motos llamativas ni con logos o calcomanías, ni colores llamativos, casi pasaban desapercibidos por apariencia, más no para el ciudadanos que anda pendiente de movimientos raros o sistemáticos.
Sin duda alguna una banda de motoristas bien organizada, que no salen a robar sin hacer un trabajo previo de inteligencia de la zona donde existen múltiples salidas para la fuga, muy poca o casi nula presencia policial que por cierto también es raro, el tiempo de los semáforos, los comercios alrededor de esa manzana que no dudo que se hayan dado cuenta de lo que pasaba y nadie reportaba nada, porque creo que al fin de 6 o 7 asaltos además de mis 5 o 6 llamadas al 110 y no dudo que más llamadas de conductores testigos de lo que sucedía pasaron fácilmente 15 minutos sin que la presencia de las autoridades llegara hasta que a lo lejos se escuchó una sirena como anunciando la hora que tenías que escapar.
A poco más de media cuadra vi a uno de los motoristas bajarse de la motocicleta y meter un arma debajo del asiento de la moto donde debo decir no creí que hubiese espacio, se subió y huyó.
Y así, como estas historias pasan a diario en las principales avenidas de la capital, Avenida la Reforma, 7ma Avenida de la zona 4 y 9, 6ta avenida de las misma zona son lugares donde la delincuencia organizada de motoristas hacen de las suyas escogiendo a varias víctimas que hay que decirlo, son presas fáciles por varios factores.
¿Cómo escogen mayormente a sus víctimas?
Es común hoy en día ver al conductor malabareando con el timón del vehículo y no es por ebriedad, es porque son esclavos del teléfono inteligente, es fácil diferenciar en el tráfico quien va viendo la pantalla de su teléfono, se queda atrasado en el tráfico, frena bruscamente, maneja de forma imprudente, pero por sobre todo por la manera más simple, el brillo del teléfono frente a la cara de la persona o personas, es fácil dilucidar cuántas personas van solo por el brillo de los teléfonos.
La víctima va prestando un 40% de atención a la conversación escrita del teléfono, imágenes, llamadas, un 15% a maniobrar el teléfono para mantener esa conversación, un 25% al manejo mediocre (manejo físico, cambios de marcha, aceleración, frenado, cambiar de estación o canción en la radio) , el otro 20% a la conducción (uso correcto de retrovisores, pide vías, ser consciente de la conducción) y al entorno (semáforos, peatones, otros vehículos, señales viales, tráfico), es prácticamente imposible estar consciente del entorno en esas condiciones.
La víctima no debe ser una presa fácil, pero a veces parece que se esfuerzan en ser víctima fácil, no ponen atención al entorno, ya no es posible andar como que se viviera en una sociedad sin violencia, sin delincuencia.
En el vehículo hay que prestar atención a los retrovisores, al entorno, a la forma de proceder de los motoristas, si llevan las manos en el manubrio, si voltean constantemente a los vehículos, miradas entre ellos, ademanes que se hagan entre ellos, también ser muy conscientes que no vienen solos nunca, aunque sea un solo motorista por lo menos viene otro con él en otra motocicleta, por eso es muy importante la buena colocación de los retrovisores, donde se tenga buena visión a los laterales y la parte trasera,.
Es importante cerrar espacios en los carriles de forma sutil, sin buscar confrontación pues no es ningún secreto que los motoristas se acuerpan ante esta situación aunque sean unos desconocidos pero son como una hermandad cuando estas situaciones suceden, así que el cierre de espacios debe ser sutil. Los movimientos bruscos en vez de tranquilizar altera a la gente y es buscarse problemas donde a veces no existen. Los movimientos bruscos que usted realiza es por la reacción de no prevenir antes los movimientos o posibles situaciones que pudo evitar con sutileza.
La prevención debe ser la primer herramienta a utilizar, pero la prevención tiene que ser en todo sentido, no solo prepararse y andar armado, porque portando arma de fuego debe ser maximizar su prevención.
Siempre he dicho que el andar armado no es garantía de salir con vida de un altercado, evitar los conflictos, evitar las situaciones de peligro, evitar los conflictos, lidiar con las situaciones de peligro con inteligencia no es carencia de valentía.
La meta es salir vivo de los conflictos, la meta es llegar a su casa con vida.
Vivimos en un país de altos índices de delincuencia, de violencia, hay que aprender a sobrevivir en él,
Los buenos ciudadanos podemos actuar en contra de ello y que no se tergiverse lo que digo, que no se malinterprete, hablo de unirse como sociedad y no voltear como si nada pasara cuando una persona es víctima de la delincuencia, reporte puntos de delincuencia en redes sociales, llame a las autoridades, sea observador, no se ponga en riesgo, prevenga, no se distraiga,
sea inteligente, luego de ello podemos tocar de forma más detallada tips para minimizar ser una víctima fácil.
Quiero terminar esta publicación con esta pequeña frase.
"Si alguien puede está entrenado y puede hacer algo, está en la obligación de hacer algo"
Gracias por leer.